Battaglia, de campeón con Boca y echado en una YPF a ser el peor DT de la historia de Huracán

Seguramente, Sebastián Battaglia no habría imaginado el complicado escenario y el final tan apresurado que le esperaban cuando debutó contra Godoy Cruz el 12 de mayo, reemplazando a un Diego Dabove cuyo barco se hundía. 

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Su paso por el banquillo del León fue efímero, con tan solo nueve partidos disputados en un mes y medio. Desafortunadamente, durante su breve ciclo, Huracán no pudo obtener ninguna victoria.

El Globo no logró ganar ni un solo partido, cosechando cuatro empates y cinco derrotas, lo cual representa uno de los peores registros en la historia del club. Jorge Célico, quien fue interino en 2003, también alcanzó una racha de nueve partidos sin triunfos en la Primera División. Sin embargo, su caso era especial, ya que asumió el cargo en calidad de interino cuando el equipo estaba al borde del descenso.

Si consideramos que Battaglia tampoco pudo guiar al equipo hacia una sola victoria, a pesar de ser el director técnico principal y confirmado, se convierte en el peor rendimiento registrado en la historia de Huracán en la Primera División. 

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El técnico venía de una traumática salida de Boca, donde fue despedido por el Consejo de Fútbol en una estación de servicio de YPF tras la eliminación en la pasada edición de la Libertadores, a pesar de haber obtenido dos títulos locales. 

En este caso, Battaglia no contaba con respaldo y varios directivos deseaban su salida debido a los malos resultados y al enfrentamiento con los hinchas durante el partido contra Newell's (donde respondió a los insultos de los plateístas tras el empate). "Me voy con mucha bronca", declaró, y esta mañana se acercó a La Quemita para despedirse y recoger sus pertenencias.