El descarado error arbitral con el que le robaron a Godoy Cruz
En medio de un polémico segundo tiempo que protagonizaron San Lorenzo y Godoy Cruz, se vivió uno de los errores arbitrales más descarados del campeonato.
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La escena comprometedora ocurrió a los 27 minutos del complemento, cuando Malcom Braida le pasó la pelota al arquero Facundo Altamirano, y el ex Banfield agarró la pelota con las dos manos. Reglamentariamente, eso es considerado como una "cesión", y se sanciona con tiro libre indirecto desde el lugar en el que el arquero toma la pelota.
No obstante, Andrés Carlos Gariano, el árbitro del cotejo, decidió no sancionar nada y benefició a San Lorenzo. Para males mayores, el Ciclón había abierto el marcador minutos antes, con un milimétrico gol que previamente pasó por el VAR.