La llamativa denuncia de los All Blacks que pone en peligro la final del Mundial
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En la emocionante final que ganaron los Springboks hubo cuatro tarjetas amarillas y además una roja para el capitán de los All Blacks, Sam Cane, por una tackle alto. Esta situación dejó al equipo oceánico con 14 jugadores durante más de la mitad de la final.
Estas jugadas no pasaron desapercibidas para las autoridades neozelandesas y no fue lo único que reclamaron. La polémica no se detiene allí, ya que en el segundo tiempo, el capitán sudafricano Siya Kolisi recibió una tarjeta amarilla por un tackle que pareció similar al de Cane contra Ardie Savea. Esto generó un debate sobre la consistencia de las decisiones del árbitro en el partido.
Además de las decisiones del árbitro, Nueva Zelanda expresó su inquietud por la anulación de un try de Aaron Smith debido a un supuesto toque en la línea. La intervención del oficial televisivo en este momento crucial del partido generó preguntas sobre la precisión y la consistencia de la tecnología utilizada en el rugby.
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El entrenador de los All Blacks, Ian Foster, al regresar a Nueva Zelanda, manifestó su deseo de que la World Rugby aclare estas decisiones controvertidas.
"Hemos enviado un archivo a la World Rugby para que hagan algunos comentarios. Creo que la prensa puede adivinar las jugadas que deseamos aclarar. Ojalá la WR lo haga", señaló Foster en declaraciones publicadas por el sitio NewShub.
