Caso rugbiers franceses: la declaración de una joven que podría beneficiar a los deportistas
El caso de los rugbiers franceses Hugo Auradou y Oscar Jégou, acusados de abuso sexual en Mendoza, avanzó con importantes novedades este viernes. La defensa de los deportistas busca el sobreseimiento, una decisión que se tratará la próxima semana. Sin embargo, la denunciante informó que no se presentaría a la última sesión de la pericia psiquiátrica y psicológica, lo que retrasará la estrategia de los acusados para archivar la causa y regresar a Francia.
Quién es la testigo clave que podría sentenciar a los rugbiers acusados de abuso en Mendoza
En este contexto, surgió la declaración de una testigo clave que arrojó más detalles sobre lo ocurrido en la noche en cuestión. Esta mujer de 24 años relató lo que presenció en el boliche Wabi, donde los protagonistas se conocieron, y en el trayecto hacia el hotel Diplomatic, lugar donde habría tenido lugar el abuso. Según su testimonio, "se notaba que iban a tener sexo" entre Auradou y la denunciante, describiendo el comportamiento de ambos en la discoteca.
La testigo afirmó que la denunciante y uno de los rugbiers se besaron en el boliche, y luego compartieron un taxi hacia el hotel donde se alojaba el equipo francés tras su victoria sobre Los Pumas.
La joven también había entablado relación con otro deportista francés y los acompañó en el viaje. "Creo que a mitad de la noche vimos a los franceses. Estuvieron bailando con nosotras, yo estuve con uno", comentó, y añadió que la denunciante se mostraba risueña y en actitud consensuada. Ante la pregunta del abogado defensor, Rafael Cúneo Libarona, la testigo reiteró que la intención de la pareja era tener sexo.
Por otro lado, se sumó la declaración del team manager de la selección de rugby de Francia, Patrick Arlettaz, quien, a través de una videoconferencia, comentó haber compartido unos segundos en el ascensor con la denunciante cuando esta abandonaba el hotel. Las cámaras de seguridad registraron la entrada de la mujer a las 08:43, después de haber dejado la habitación de los acusados. En las imágenes se observa que, al coincidir con Arlettaz en el ascensor, ambos intercambiaron sonrisas, pero no se dirigieron la palabra.
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Hasta el momento, el fiscal Darío Nora ha considerado que las pruebas no son suficientes para justificar la prisión preventiva de Auradou y Jégou. Además, señaló que la denunciante mostró contradicciones en sus declaraciones y que el examen forense no reveló lesiones en sus partes íntimas, aunque todavía se esperan los resultados de las pericias psicológicas.
Por ahora, los rugbiers permanecen en libertad, a la espera de la audiencia de la próxima semana, en la que se discutirá si serán sobreseídos y podrán volver a Francia, o si deberán continuar en Argentina mientras avanza el proceso.