Como algunos choferes se hacen los vivos, el gobierno tomó una decisión que favorece al pasajero
Es moneda corriente en los viajes de media y larga distancia dentro de Mendoza, a tal punto que por las reiteradas denuncias el gobierno tuvo que tomar una medida para favorecer al pasajero.
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Se trata del famoso "no tengo cambio". Como los precios de los distintos recorridos no están redondeados, los billetes de $2 y $5 ya no existen y las monedas lejos están de ser un método de pago habitual en estos tiempos, esta respuesta de los choferes se hizo cada vez más frecuente.
Fue tal la cantidad de denuncias que se registraron en los últimos meses que el Gobierno de Mendoza, a través del EMOP (Ente de Movilidad Provincial), tuvo que tomar cartas en el asunto, intimar a las empresas de transporte de media y larga distancia a tener cambio siempre y favorecer al usuario, como corresponde, ante una situación que no tenga resolución.
Los usuarios argumentan que "los choferes se quedan con el vuelto" y ante la duda del ente provincial sobre si en más de una ocasión esto se trata de una avivada de los conductores, es que las empresas ahora tendrán que cumplir a la demanda del vuelto, les guste o no.
El EMOP intimó a las empresas de Mendoza a "garantizar, en todo momento, que los choferes contarán con la suficiente disponibilidad de efectivo de baja denominación a fin de que puedan dar el vuelto correcto del pasaje".
¿Y si de verdad no tienen cambio? "El redondeo será al valor más bajo que pueda otorgar vuelto", indica la medida. Es decir, a favor del pasajero.
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