Conmoción y espanto en Maipú: "La persona con la que hiciste la primaria es un asesino"
Vecinos de los distritos de Luzuriaga y Gutiérrez, Maipú, no salen de la conmoción y la angustia. Es que en esas zonas mataron a Florencia Romano, la adolescente desaparecida desde el sábado 12 de diciembre cuando se fue de su casa en Rodeo de la Cruz, Guaymallén.
Florencia Romano: una policía fue la que desestimó la llamada al 911 y la apartaron
Además, en esa zona se crio y creció Pablo Arancibia, el hombre imputado por el femicidio de la adolescente. Los investigadres están seguros de que fue él quien convencipó a la chica de ir a su casa, la mató y luego intentó hacer desaparecer el cuerpo.
Los familaires, conocidos y amigos del acusado de femicidio no salen de su asombro. Aún shockeados por la noticia salieron a pedir Justicia por Florencia y dejaron en claro que quieren la pena máxima para su conocido.
"Miércoles te enteras que un amigo tuyo de la primaria está detenido por la desaparición de una chica de 14 años, que hay un vinculo y pensas "naaaah se re están equivocando, si el Pablito es un gil, como se va a mandar esa! ya fue, ya va a aparecer el verdadero autor del hecho..." y el miércoles pasa de blanco a gris... cae la noche y empezas a decir "loco... si? será él? pero si dijo que el viernes nos juntemos a despedir el año el mismo martes a la mañana y resulta que en la noche es detenido... che, que onda?" y el jueves empiezan a aparecer pruebas y cosas que incriminan... jueves 20:00 el dia se torna negro, te enteras que la persona con la que hiciste guardería, jardín, primaria, comiste asados, compartieron un vaso de fernet, se c4garon de risas, recordaban anécdotas de la primaria, del viaje de egresado de repente es un asesino... el mundo se te desploma totalmente por completo, pensas en tus hijos, en las veces que vino a casa y no te cabe jamás en la cabeza que ese pibe que creció con vos mato a una niña de 14 años... JUSTICIA POR FLORENCIA!!!!m posteó un joven maipucino.
El comentario se llenó de mensajes de gente en común que aún no puede creer lo que pasó.