Investigan a municipales acusados de vender carnets de conducir en Guaymallén: se pagaba hasta $28 mil por un ejemplar

Un intermediario, conductores y empleados municipales son algunas de las personas implicadas en lo que sería una banda que se dedicaba a vender licencias de conducir en Guyamallén.

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El modus operandi era simple y comenzaba con pasarle los exámenes escritos a los aspirantes previo a que debieran rendirlos. La investigación comenzó a mediados de año cuándo el fiscal Flavio D´Amore, de la Fiscalía de Instrucción N°7 de Delitos Económicos, recibió una denuncia donde dieron cuenta de varias irregularidades en la Sede Central del Registro de Licencias de Conducir del Carril Nacional y Antonelli en Guaymallén.

Las fuentes aseguraban que se estaban expidiendo carnets de conducir a cambio del pago de dinero. La denuncia se formalizó y el fiscal, con el personal de la División de Delitos Económicos, iniciaron las averiguaciones y se ordenaron varias medidas para encontrar pruebas e identificar a los responsables de dicha maniobra fraudulenta, informó el periodista Hernán Adrover del diario Sitio Andino.

Según trascendió la investigación estaba dirigida a identificar a los autores porque estaban involucrados personas de "peso" del mismo Registro. La maniobra consistía en que las personas que necesitaban sacar por primera vez el carnet o renovarlo, llamaban a una persona que iniciaba los "trámites" y contactos con los empleados municipales.

Este delito de cohecho -soborno- se basaba en que los interesados pagaban importantes sumas de dinero de acuerdo al carnet al que necesitaban acceder. "Las pruebas incluyen pagos desde 14.000 a 28.000 de acuerdo a lo que requerían", indicaron fuentes judiciales.

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El de menor valor es la licencia básica para poder conducir autos o motos. El segundo valor correspondía al plástico para conductores profesionales. Según las pruebas recolectadas hasta el momento, los autores del ilícito les ofrecían y facilitaban las herramientas para poder rendir de manera correcta.

"Les daban las respuestas de los exámenes, conseguían autos y les facilitaban los cursos on line sobre género y estrellas amarillas", indicaron. De esa manera, cuando iban a rendir, ya sabían de antemano lo que les iban a preguntar en los temarios.

Lo cierto es que el fiscal comenzó a realizar allanamientos en oficinas municipales y domicilios, "hubo sorpresas por el allanamiento en la Municipalidad pero todos colaboraron", destacaron las fuentes a Sitio Andino.

Lo cierto es que la investigación continúa y podrían producirse las primeras detenciones en las próximas horas.