La increíble Ferrari de Mr. Poronga: "Fue mi sueño desde los 15 años"

El servicio de limpieza de cañerías en Detroit de este triunfante mendocino parece rendir sus frutos. Federico Muñoz es toda una celebridad en nuestro país con su servicio "Mr. Poronga", nombre el cual los yanquis quizás no entiendan por completo.

Su éxito parece ser tan grande y sus ganancias tan abruptas que se notan bien: a través de sus redes sociales y su cuenta de Youtube, Muñoz compartió un video con uno de sus grandes lujos. Con más de veinte años viviendo en el país del norte, el mendocino ya tiene su Ferrari (y un par de otros autos más).

En una entrevista con Clarín, Muñoz cuenta como compró su "pequeño auto":  "Se la compré a mi hermano mayor hace unos meses, después de que él compre un Lamborghini Gallardo negro. Es rápida pero ya no me animo a manejar muy fuerte. Una vez casi me mato con la (moto) R6 un día que iba a 240 kilómetros (150 millas) y desde eso ando despacio".

"Una Ferrari fue el sueño desde que tenía unos 15 años", comentó Frank, nombre con el que lo conocen en EEUU.

También le preguntaron si la usaba muy seguid: "Muy poquito. No es de uso diario porque es un poco incomoda para todos los dias. Usualmente la llevo a mi esposa Olga a salir pero trabajo 70 horas a la semana y no me da tiempo".

¿Cómo surgió y por qué Mr. Poronga es un éxito?

"Fue un poco cómico, nosotros conocíamos a un muchacho que nos venía a hacer los arreglos a nuestras casas. Él es de Uruguay pero es un tipo resentido, con mala onda, que decía todo el tiempo que en todos los países pasa lo mismo, ningún negocio funciona. 'Uruguay, Argentina, Estados Unidos, es todo lo mismo hace 30 años que estoy acá y no pasa nada', nos decía siempre. Y mi hermano un día se cansó y le dijo: 'Vas a ver que no es así, yo le voy a poner una compañía a mi hermano que se va a llamar Mr. Poronga y va a terminar facturando 1 millón de dólares por año".

Los secretos de "Mr. Poronga", el mendocino que triunfa en EE.UU

De esa chicana surgió el nombre que fue un éxito en aquella región. "La compañía comenzó como una broma entre mi hermano y yo, y no pasó mucho tiempo para que nos diéramos cuenta de que el negocio de la limpieza de drenaje era muy lucrativo".

Federico también suma una explicación bien nacional y popular al nombre: "El argentino se cree el más poronga del mundo. Por eso le pusimos este nombre a la empresa. Viste que en todas las industrias siempre hay un argentino que es capo, bueno viene de ahí la idea". ¿Alguien entiende lo que significa allá? "El norteamericano piensa que es el nombre de mi abuelo", le contó entre risas a Eduardo Feinmann.