Los pasajeros podrán renunciar a los subsidios del transporte público y esto saldría el boleto
El ministro de Transporte, Diego Giuliano, anunció que los usuarios en Argentina podrán optar por renunciar a los subsidios aplicados en las tarifas de transporte, que se reciben a través de la tarjeta SUBE, de manera voluntaria.
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La alternativa estará disponible para los aproximadamente 5 millones de usuarios de colectivos y trenes de jurisdicción nacional que se desplazan diariamente en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y las 53 localidades con SUBE en todo el país. Los usuarios podrán gestionar esto desde el 20 de octubre a través del sitio web oficial. Los pasajeros pueden completar el formulario de renuncia en línea a partir del 27 de octubre.
Esta medida permitirá que los usuarios renuncien a los beneficios sociales y descuentos asociados a la tarjeta SUBE, incluidos los trasbordos gratuitos y otras tarifas reducidas. Sin embargo, según el ministro, la renuncia al subsidio no afectará la capacidad de comprar el dólar ahorro, ya que no hay una vinculación entre ambas en este momento.
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El Gobierno no espera un gran impacto económico con esta medida, pero busca proporcionar una opción para aquellos que deseen renunciar a los subsidios y respaldar sus creencias políticas. La medida tiene lugar en un contexto político en el que las opciones políticas que cuestionan el costo del Estado y los subsidios han ganado popularidad.
Independientemente de esta opción, el Gobierno confirmó que las tarifas de transporte público seguirán congeladas hasta el 10 de diciembre. Además, se está considerando un cambio en la lógica del sistema de subsidios hacia un subsidio a la demanda a través de la tarjeta SUBE.
Esta medida se aplica a los usuarios de líneas de transporte automotor de jurisdicción nacional, transporte ferroviario en el AMBA y líneas de transporte urbano interjurisdiccional de jurisdicción nacional.
En el AMBA, el valor del pasaje en colectivos con subsidio oscila entre $52,96 y $72,61. Sin subsidio, el costo sería de $700. En el Gran Mendoza, el boleto tiene un costo de $70. Sin beneficios, el precio se acercaría a $850.
El Gobierno está tratando de ofrecer a los usuarios más control sobre su participación en el sistema de subsidios, permitiéndoles renunciar si lo desean, en medio de un debate sobre los subsidios y el costo del Estado en Argentina.