Uso de pirotecnia: hubo más heridos que el año pasado en Mendoza y hay preocupación
Las cifras de heridos por pirotecnia aumentaron en Mendoza este año, y las expectativas para Año Nuevo generan preocupación, ya que se ha observado un aparente relajamiento en la venta de estos productos en distintos puntos de la provincia. Según datos oficiales del Ministerio de Salud, la Nochebuena de 2024 dejó un saldo de 11 lesionados, superando los registros del año pasado, con siete casos más. Entre las víctimas, seis niños fueron internados en el hospital Notti por quemaduras graves.
Tomó, manejó, chocó y mató a una mujer en Luján
Este incremento ocurre a pesar de las normativas vigentes que prohíben el uso de pirotecnia, consideradas una amenaza para la salud pública y el bienestar de la comunidad. La Fundación ConecTEA advierte que los fuegos artificiales alcanzan niveles de ruido de hasta 120 decibelios, lo que no solo daña el oído humano, sino que también afecta gravemente a personas con autismo, aumentando su estrés y malestar. Además, grupos vulnerables como mascotas y adultos mayores sufren las consecuencias de estas explosiones sonoras.
En Mendoza, la legislación busca alcanzar "pirotecnia cero". En 2020, todos los municipios acordaron prohibir la fabricación, venta y uso de fuegos artificiales. Sin embargo, Tupungato es la excepción, ya que permite el uso de pirotecnia lumínica, o fría, únicamente para eventos especiales.
La ley provincial 8,632 establece sanciones severas para quienes violen estas disposiciones. Según el artículo cuarto, la venta de pirotecnia prohibida puede implicar hasta siete días de arresto, multas equivalentes a 15 días de salario, decomiso de los productos y clausura del establecimiento por un período de hasta 180 días. Por su parte, el uso de artefactos prohibidos conlleva multas y decomisos adicionales.
La comunidad y las autoridades deben reforzar los controles para evitar que estas prácticas afecten a más personas, especialmente durante las celebraciones de Año Nuevo.
