Argentina respaldó el informe de Bachelet que cuestiona al gobierno de Maduro

A través de un comunicado oficial la Cancillería Argentina informó este martes que el país mantendrá su liderazgo en la defensa global de los derechos humanos y sostendrá los principios de paz y resolución política de la crisis venezolana. 

Según el comunicado, la postura que fijará Argentina ante Consejo de Derechos Humanos de la ONU será la de valorar y apoyar con fuerza "el trabajo realizado por la Alta Comisionada de las Naciones Unidas Michelle Bachelet".  

En esa línea, las autoridades argentinas al gobierno de la República Bolivariana de Venezuela a cooperar plenamente con el Consejo y todos sus mecanismos, y a implementar íntegramente las recomendaciones hechas por la Alta Comisionada en sus informes. Así como con su llamado a que conduzca investigaciones prontas, exhaustivas, independientes, imparciales y transparentes sobre las alegaciones de violaciones a los derechos humanos, lleve a los perpetradores ante la justicia y garantice una reparación adecuada a las víctimas.

Un economista afirma que superar la crisis actual será más difícil que la de 2001 

En el mismo sentido Argentina respaldará ante el Consejo la necesidad de reforzar la instalación de una misión permanente de la Alta Comisionada en Caracas (Bachelet), dotada de los recursos humanos y de los elementos que le permitan desplegar una acción remedial frente a dichas circunstancias y contribuir a encaminar soluciones apropiadas.

El comunicado resalta que el diálogo y la cooperación con las autoridades como las respuestas eficaces a los pedidos efectuados en distintos informes, son fundamentales para revertir la actual situación en derechos humanos en Venezuela.  Y destaca que "son las autoridades venezolanas las responsables de respetar sus obligaciones internacionales de derechos humanos, así como de garantizar la paz social y la estabilidad política, lo cual resulta aún más necesario cuando se encara un proceso electoral". 

El único guiño al gobierno Nicolás Maduro de parte de la Argentina es la condena manifiesta del presidente Alberto Fernández a los bloqueos y las sanciones que, pretendiendo presionar a las autoridades, agreden especialmente al pueblo venezolano y contribuyen a un sufrimiento aún mayor del mismo, dada la grave situación económica y social en la que se encuentra.