Bajó el riesgo país y quedó en el nivel más bajo registrado desde el 2020
En un contexto de estabilidad cambiaria, el Banco Central de Argentina aceleró sus compras en el mercado mayorista, beneficiándose de un incremento en el flujo de dólares provenientes de los exportadores. Este escenario favoreció notablemente a los activos bursátiles del país, especialmente a la deuda denominada en dólares.
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Los bonos en dólares de Argentina registraron un aumento significativo este jueves, con un ascenso promedio del 2,9% en los bonos Globales listados en Wall Street, mientras que los Bonares, tanto con legislación local como extranjera, mostraron una ganancia promedio del 1,8%.
Los incrementos en el año alcanzan aproximadamente un 30% en promedio, evidenciando un sólido desempeño en 2024. Además, el riesgo país experimentó una caída, ubicándose en 1.359 puntos básicos, lo que representa el nivel más bajo desde noviembre de 2020.
En medio de estas tendencias positivas, los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) también vieron un aumento del 1% en promedio, ajustado por la moneda local.
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A pesar de una disminución general en los principales índices de Wall Street y una caída del 2,4% en el índice S&P Merval de la Bolsa porteña, los analistas mantienen una perspectiva optimista sobre el potencial de crecimiento de estos activos.
El Banco Central aprovechó el buen momento para adquirir cerca de 500 millones de dólares, gracias a una robusta cosecha que ha duplicado el volumen negociado en el mercado mayorista, destacándose como el mayor nivel de compra desde diciembre de 2022. Este movimiento ha contribuido a un aumento sustancial en las reservas internacionales del país.
En el ámbito económico general, el Gobierno argentino busca implementar medidas para desregular la economía y alcanzar un equilibrio fiscal. Esta dirección se refleja en la reducción de la emisión monetaria y una tendencia hacia la desmonetización, según el análisis de expertos. El Fondo Monetario Internacional ha reconocido la disminución de la inflación y la mejora de otros indicadores económicos, continuando su compromiso con Argentina en el marco de un programa de financiamiento.
Finalmente, la recaudación fiscal de marzo ha mostrado un aumento interanual del 230,6%, un indicador que, junto a la estabilidad del dólar alternativo y las negociaciones para fortalecer la economía, presenta un panorama de recuperación económica para Argentina.
