El estremecedor relato de uno de los testigos de la muerte de la beba en la Casa Rosada
Alfredo, un conocido vendedor de alfajores y paquetes de pastillas de la avenida Paseo Colón, dio detalles del triste hecho que ocurrió en las afueras de la Casa Rosada.
Hoy, en horas de la madrugada, una beba de tres meses murió en las afueras de la sede del Poder Ejecutivo nacional.
Dolor y conmoción: una beba de tres meses murió a pocos metros de la Casa Rosada
El comerciante, en diálogo con los colegas de Infobae, señaló que llegó al lugar cerca de las 5:15 y empezó a escuchar los gritos de una joven pareja que se encuentra en situación de calle.
En un primer momento, el hombre pensó que se trataba de una discusión, aunque poco después sintió a la madre gritar: "mi beba, mi beba".
Inmediatamente, la pareja se acercó con la criatura en busca de ayuda porque veían que no despertaba. El vendedor ambulante, al no tener teléfono celular, les dijo que vayan a la Casa de Gobierno y le pidieran ayuda a la guardia policial.
Alfredo, el vendedor ambulante que presenció el dramático hecho
Y desde allí se comunicaron con la Policía de la Ciudad y el SAME. A los 4 minutos, la ambulancia llegó pero ya era tarde: no tenía signos vitales.
"Es una parejita de jóvenes la que paraba ahí. Tendrán entre 25 y 30 años. No dormían siempre ahí. Hoy estaban acá, otros días se iban a la vuelta sobre Plaza de Mayo. Yo los saludaba a veces, pero no tenía conversaciones con ellos. Es más, nunca me di cuenta que tenían dos criaturas. Siempre pensé que había una sola nena", contó Alfredo, quien fue convocado por la policía para ser testigo.
"No sé qué tuvo la bebé, si se ahogó con la leche u otra cosa. Vi que todos corrían pero no podía dejar solo mi puestito", agregó.
Sobre la vereda todavía se observan las pocas pertenencias de la pareja, que a eso de las 8:30 fue trasladada a la Comisaría Vecinal 1D para recibir asistencia psicológica.
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Sobre Hipólito Yrigoyen, el sitio en el que estuvo más de tres horas el cuerpo de la bebé fallecida, instalaron un gazebo rojo para preservar la escena. A las 9:00, efectivos de la Policía Científica la trasladaron a la morgue para efectuar las pericias correspondientes.
"Siempre los veía cuando pasaba por acá para ir a trabajar. Es terrible lo que ocurrió. Me llamó la Policía para dé mi testimonio. No vi mucho, solamente que los padres estaban desesperados", expresó Javier, otro de los testigos.
