"Estamos preocupados": se sinceraron en el Gobierno y admitieron que no pueden con una vieja problemática

El jefe de Gabinete, Agustín Rossi, reconoció este sábado los problemas que tiene el Gobierno para controlar la inflación.

Los dichos del funcionario se dieron a pocas horas de que el Indec, haya oficializado un IPC de 7,7 % correspondiente al mes de marzo.

"Pensamos que lo íbamos logrando, pero no fue así", admitió el ministro coordinador.

"Claramente no es lo que nosotros esperamos ni va en el sentido del esfuerzo que venimos sosteniendo para tratar de encontrar un sendero descendiente de la inflación", señaló.

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"Nadie puede estar contento -menos nosotros- con este indicador de inflación. Después, hay una cantidad de explicaciones técnicas. Tenemos una inflación que viene viajando a un ritmo alto y cuando a ese viaje se les suman cuestiones estacionales, claramente termina generando un número de estas características, que lo único que hace es interpelarnos", sostuvo Rossi.

Y recalcó que está la decisión del Gobierno de "redoblar los esfuerzos" para ir tras un sendero descendente de precios.

"Pensábamos que en el último trimestre del año pasado lo íbamos logrando. No fue así en el primero y en el segundo mes del año, ni tampoco en el tercero", reconoció.

Además, mencionó que "claramente, nosotros tenemos una valoración de lo que sucedió en enero. La primera quincena los precios se venían moviendo más o menos al mismo nivel que en noviembre y diciembre, y en la segunda quincena empieza una aceleración a partir de lo que se conoce como, entre comillas, que el mercado toma nota del efecto negativo que iba a tener la sequía sobre las reservas y empieza el intento de corrida devaluacionista, que es lo que viene acompañando al ministro Sergio Massa desde que se hizo cargo de la economía".

Rossi consideró que "el dolor que genera la inflación al conjunto de la sociedad, sobre todo en los sectores populares, lo entendemos y da muchísima bronca que suceda en nuestro gobierno".

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Por otro lado, en declaraciones a la prensa radial, manifestó que en Casa Rosada esperan que los indicadores registrados en marzo no vuelvan a darse en el resto del año.

"Siempre marzo estacionalmente es un mes complicado. Es complejo, tiene un cambio de estación y se ha visto impactado por cuestiones estacionales, el alargue del verano y una serie de circunstancias... No quiero poner excusas, pero marzo siempre es un mes con inflación por encima del promedio. Esperamos que abril marque claramente un descenso del proceso inflacionario en la Argentina", añadió.

Sobre el cierre, sostuvo que "todo el tiempo" se toman medidas que buscan la "recomposición de ingreso de los trabajadores", aunque fue contundente: "Estamos preocupados y ocupados".