Horror en Salta: salió a andar en bicicleta, le tiraron nafta y murió prendido fuego
Un ciclista murió tras ser rociado con combustible y prendido de fuego mientras paseaba por un camino cercano a la ciudad de Salta. El cruento ataque se registró cerca de las 12 del miércoles, tuvo como víctima a Ramiro Sagasta, de 44 años, y se registró en la ruta 28, camino a San Lorenzo.
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El hombre comenzó súbitamente a arder a un costado de la ruta y comenzó a ser asistido por personas que circulaban por la zona, las cuales llamaron a los servicios de emergencia. Sagasta, con graves quemaduras, fue trasladado al Hospital San Bernardo, de la capital salteña, donde murió poco después de ser ingresado.
En el caso tomó intervención la fiscal Verónica Simesen de Bielke, y en el marco de la investigación, se pudo establecer que en primer lugar, Sagasta había sido asistido por una pareja que se desplazaba en moto y otro ciclista, los que se retiraron en el momento en el que arribó al lugar una ambulancia, aunque con el correr de las horas fueron localizados.
En tanto, según el sitio del diario El Tribuno, una testigo afirmó que al ciclista fallecido le arrojaron un líquido inflamable desde una moto antes que se prendiera fuego.
En ese marco trascendió que una de las principales hipótesis es la de un cruento asesinato en el marco de un asalto perpetrados por "motochorros", que intentaron apropiarse de la bicicleta de la víctima.
El cadáver de Sagasta fue llevado al Cuerpo de Investigaciones Fiscales, donde se le iba a realizar una autopsia para determinar las causas del deceso, aunque todo apunta a que se produjo por las quemaduras recibidas.
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También se apunta a certificar si el hombre fue rociado con un líquido inflamable que habría provocado la deflagración.
Según pudo saberse, Sagasta se encontraba casado y era padre de un niño y una niña, y se desempeñaba como empleado en una empresa distribuidora de sistemas de seguridad electrónica.
Pablo Echazú, un amigo del ciclista, posteó en su sitio de Facebook para despedirlo y lo describió como "un ser humano ejemplar: sin maldad, dedicado a tu familia, honesto, siempre dispuesto a ayudar".
