Renta inesperada: el impuesto italiano que inspiró a Guzmán a crear la versión nacional
En Europa, la crisis energética como consecuencia de la guerra en Ucrania, derivó en una serie de medidas que adoptaron los Gobiernos para minimizar el impacto doméstico. Italia creó un impuesto del 10% sobre los beneficios extraordinarios que registraron las empresas energéticas.
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Es con ese gravamen como ejemplo que el ministro de Economía, Martín Guzmán, busca ejemplificar lo que representa su proyecto que apunta a gravar por única vez a la renta inesperada.
El gravamen se llama "impuesto a los beneficios extraordinarios" y lo definió el primer ministro italiano, Mario Draghi. El objetivo es solventar una rebaja de 25 centavos de euro en el precio de los combustibles, que se disparó tras la invasión rusa, y congelar el precio de la energía durante el verano europeo.
Cómo es el impuesto italiano que inspiró a Martín Guzmán
Cuando presentó el "impuesto a los beneficios extraordinarios", Mario Draghi dijo que buscaba "dar al país una respuesta a la guerra en Ucrania" ante el aumento de los precios de la energía. "Las medidas ascienden a 4400 millones de euros, que se suman a los 16.000 millones gastados en los últimos seis meses para defender a los italianos del aumento de los costes energéticos", precisó.
Consiste en un impuesto del 10% sobre los beneficios extraordinarios de 40.000 millones de euros que, según el Gobierno italiano, las empresas energéticas lograron en el último semestre respecto del mismo período del año anterior.
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"Gravamos una parte de los beneficios extraordinarios que están obteniendo los productores gracias al aumento de los costes de las materias primas, y distribuimos ese dinero entre empresas y familias en dificultades", argumentó el primer ministro.
Si bien aún no ha trascendido de manera oficial en qué consiste el proyecto oficial de renta inesperada craneado por Martín Guzmán, se sabe por el momento que buscará crear -al estilo italiano- un impuesto sobre las empresas que tuvieron fuertes alzas en su ganancia, sin que eso responda a inversiones o a mayor empleo. Además, tal como el italiano, la versión Argentina se aplicaría por única vez.