Robledo Puch está a un paso de abandonar la cárcel y así reaccionaron los familiares de sus víctimas: "Si sale, tengo miedo de que..."

Carlos Eduardo Robledo Puch, también conocido como el "Ángel Negro", lleva más de 50 años tras las rejas por haber once personas en 1972.

Jorge Alfonso, su abogado, está cerca de obtener la libertad de su cliente. Igualmente, la Justicia de San Isidro no está muy convencida con esto, pese a que el condenado ya cumplió la pena que se le impuso en su momento.

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Ante la posible libertad de Puch, la hermana de una de las tantas víctimas, está aterrorizada: "Si liberan a ese monstruo no voy a vivir tranquila", dijo la mujer que prefirió quedar en el anonimato.

"Si sale, tengo miedo de que me mate... nos puede matar", agregó en una charla que mantuvo con Infobae.

Y contó: "Mi hermano era sereno y estaba por dejar ese trabajo. Apareció la hiena esta y lo mató a sangre fría. Nunca nos recuperamos. Pasó el tiempo pero el dolor sigue".

El abogado del autor de los hechos, entiende "el temor de esas personas", aunque sostiene que su defendido "ha dicho que no cometió ningún asesinato. Y es una persona que sufrió todo tipo de maltratos y humillaciones en prisión. Está muy mal de salud. Ni el mismo puede lastimarse", añadió.

La hermana del sereno no es la única que está en contra de la posible liberación. Familiares de Jorge Antonio Ibáñez, el amigo y primer cómplice de Robledo, tampoco quiere saber nada con la posible decisión judicial que beneficie al "Ángel Negro".

Resulta que Ibáñez, que murió el 5 de agosto de 1971, pasó sus últimos segundos como acompañante de Carlos Eduardo Robledo Puch, que en ese entonces conducía el Siam Di Tella de su padre antes de chocar contra un taxi en Núñez.

Puch saltó del rodado antes de la colisión, pero su amigo murió en el acto.

Los familiares de Ibáñez siempre estuvieron convencidos de que Robledo mató a su amigo y simuló un accidente de tránsito.

Tras ese hecho, el hombre salió corriendo con los documentos de su amigo. Sin embargo, autoridades de la Policía Federal cerraron la causa como accidente.

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"Fue un crimen planificado. A Carlos siempre le gustaba chocar, contra árboles o contra ovejas en las rutas, y practicaba saltar antes de salir golpeado, tenía una gran habilidad. Pero esa vez con Jorge creemos que armó todo. Lo mató y sabemos los motivos", dijo al medio citado un pariente de Ibáñez, que no quiso dar más detalles.

"Encima culpó a Jorge y a su hermano Florencio, que murió hace seis años. Lo raro que el día que se cumplió una fecha de su muerte, le hackearon la cuenta de Facebook", siguió.

La sobrina nieta de Higinia Rodríguez, ultimada de ocho balazos por Puch, es otra de las que está en contra de que salga en libertad. "Nadie nos garantiza que busque a los familiares de sus víctimas. No puede estar libre".