Uno de los rugbiers sobreseídos entró a declarar y anticipó que busca "Justicia por Fernando"
Juan Pedro Guarino, uno de los rugbiers sobreseídos por el asesinato de Fernando Báez Sosa, y que declarará en la jornada de hoy, pidió hoy "justicia por Fernando" al llegar a los tribunales de Dolores, en el inicio de la tercera semana del juicio.
"Vengo a ayudar a la Justicia. Justicia por Fernando", afirmó Guarino cuando arribó junto a su padre pasadas las 8.30 al palacio de Justicia de Dolores donde se aguarda su declaración como testigo junto -entre otros- a la de Alejo Milanesi, el otro joven que fue sobreseído durante la etapa de instrucción por falta de mérito.
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Guarino, junto a Alejo Milanesi, otro de los testigos de la jornada, veraneaban en Villa Gesell junto a los ahora ocho imputados, en un primer momento también fueron detenidos y, con el avance de la causa, quedaron sobreseídos por falta de pruebas en su contra.
Por su parte, el fiscal Juan Manuel Dávila, aseguró en su ingreso a tribunales que la declaración de ambos jóvenes "es bajo juramento de ley, tienen la obligación de decir la verdad".
"Son testigos que nunca han declarado, no sabemos lo que pueden llegar a decir. No son testigos fundamentales, ni Guarino, Milanesi o (Tomás) Colazzo -otro testigo- no fueron ofrecidos por la fiscalía por cuestiones de estrategia", agregó Dávila.
Fuentes cercanas a la acusación dijeron a Télam que Guarino y Milanesi enfrentarán una declaración "muy delicada", ya que al ser citados como testigos tienen la obligación de decir verdad y con sus dichos podrían incriminar a sus amigos o bien autoincriminarse, lo que obligaría al tribunal a suspender sus testimonios ya que nadie está obligado a declarar contra sí mismo.
"Tendrán que moverse en un margen muy fino, entre decir la verdad y no perjudicar a sus amigos y no caer en un falso testimonio", especuló un vocero con acceso a la causa.
Otro testigo clave de la jornada será Tomás Ítalo Colazzo, amigo de los imputados y quien fue señalado como "sospechoso número 11" por el abogado Fernando Burlando, quien representa a los padres de Báez Sosa como particulares damnificados.
"En el caso de Colazzo, también es una situación compleja, por las mismas razones que los dos jóvenes que fueron sobreseídos, a las que se suma que él nunca fue parte de la causa, nunca brindó declaración ni fue interrogado o intervino en el marco de una actuación judicial que puede ser exigente emocionalmente", explicó a Télam el vocero judicial.