El "FIN" de Paulo Londra a su historia con Big Ligas
El joven talentoso músico y compositor argentino, Paulo Londra, contó con lujo de detalle su amarga experiencia con Big Ligas con quienes mantuvo un largo y tortuoso litigio.
Sin pelos en la lengua, pablo utilizó su cuenta de Twitter para contar a sus seguidores, y a todo el mundo, como fue la serie de hehcos que lo olbigó a estar fuera de la industria musical por un largo tiempo.
El primero de sus mensajes dice: "Todo empezó cuando al fin pude darme a conocer en Argentina, gracias a recorrer plazas y competencias, y de poder ganar "a cara de perro" algo que soñé. Llegué a soltar el tema "Relax", vi lo que la gente me alentaba y me encendí. Decidí dejar Argentina y al talento originado por las batallas de freestyle en lo más alto; seguí subiendo temas solo y hasta J Balvin se sorprendió por mi canción Luna llena".
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"Luego me contactó una youtuber y me dijo que me quería presentar a Kristo (Cristian Salazar) y a Ovy (Daniel Oviedo), el cual me lo postulaban como uno de los mejores productores latinos, y no es por desmerecer ni nada pero no superaba a los 5 mil seguidores, y siendo sincero no lo conocía, igual quedé sorprendido con todos los proyectos a futuros que me hablaban ellos dos (Ovy y K)", asegura el joven músico.
Y continúa "Confié en ellos, rechacé otros contratos porque decían que no eran lo mejor para mí. Estaba entusiasmado, pensé que todo lo mejor posible estaba por venir. Les dije que nos llamemos "Big Ligas", porque vamos a crecer tanto independientemente que nos van a admirar. Hice música como un loco; a los 19 me fui meses a Colombia y grabé sin parar. Podía hacer hasta 6 temas por día, todo gracias a esta disciplina que tenía del freestyle. Quise que mi primer tema sea "Condenado para el millón" para que sepan de lo que soy capaz. Y lo sacamos..."
"Kristo vino con unas fotocopias, una lapicera cara y un filmaker (sic), y me dijo que íbamos a hacer un video para subir a las redes y entonces nos hizo ponernos de espalda y me dijo que firme unas fotocopias mientras nos filmaban pensé que era un simple video y nunca pensé que eso fuese un contrato el cual hagan valer de esa forma tan engañosa.
"Luego de hacer el video me dijeron que mire las hojas y que mañana íbamos a tener una charla con los abogados Stephanie Chopurian y Matt Greenberg y yo, sólo en Colombia. Sin ningún amigo en verdad, no entendía que había hecho. Esa noche Ovy, quien se había ganado mi confianza como nadie, me dijo que eso que firmé no valía nada, si yo estaba disconforme, ese papel se podía romper o revisar en cualquier momento, y de la forma en que me lo dijo y en el contexto que estaba, no me quedo más que creerle".
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En otro tramo de su relato cuenta el papel que tuvieron los abogados en toda esta historia: "Se presentaron por videollamada Stephanie Chopurian y Matt Greenberg y me explicaron sobre números que nunca entendí y sobre un contrato que es difícil de entender hasta para un abogado. La explicación fue tan corta que solo duró media hora. No podía y no quería aceptar que me habían hecho firmar algo sin ver, sin un letrado a mi lado, y sin posibilidad de analizarlo con alguien cercano mío. Volví a casa diciendo que firme un contrato el cual meses después enviaron copia".
Según Paulo la cosa explotó cuando salió la canción hice Adan y Eva: "Me dijeron que lo mejor era hacer un trato con una disquera con semejante canción.
Pensé que sería romper con lo que estábamos haciendo que era ser independientes. La canción fue lanzada y pasando el tiempo me hablaron de una oferta de álbum. También dudaba..."
"No estaba seguro de aceptar pero me acuerdo estar en México, a horas de mi primer show allá, y Kristo llamándome por teléfono diciéndome que iban a haber complicaciones si no aceptábamos el álbum con Warner Music. Esa vez mi paciencia se estalló, habían dicho que íbamos a modificar los términos de nuestro acuerdo por los cuales yo no estaba conforme. Eso no sucedió y me querían hacer firmar un nuevo acuerdo."
Y sigue: "No pasó mucho tiempo, que Matt Greenberg envió una carta de intimidación a mí y mi padre (un abogado que supuestamente velaba por mi), en donde nos mostró la verdadera cara del contrato que firmé con Ovy y Kristo, en donde no era un verdadero socio/artista. La carta de Matt Greenberg decía que me podía perjudicar por todo lo que haga perder a la empresa, y que debería firmar sino podía tener graves consecuencias económicas. En ese momento me di cuenta que no éramos un equipo. Y nuevamente no me quedo más que agachar la cabeza por la amenaza que me hizo supuestamente mi propio abogado Matt Greenberg, y aceptar el trato que se haga con Warner.