Preocupación por la salud de uno de los perritos de Gran Hermano: "¿Por qué llora así?"

Esta semana se viven momentos atípicos en Gran Hermano. Los familiares de los participantes entraron para revolucionarlo todo y mientras pasan los días, van saliendo de a uno.

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Pero tras la salida de Fabián, el sobrino de Romina, y Florencia, la hermana de Camila, este viernes fue de disfrute para todos los convivientes. Como se hace durante ese día de la semana, la producción preparó una nueva fiesta para que todos pudieran disfrutar.

En un momento de la noche, Gran Hermano llamó a todos los residentes de su casa para que pasaran al sum de la propiedad. Para ese momento, los chicos debían llevar a los perritos, Mora y Caramelo, a la habitación amarilla, para que quedaran resguardados durante el festejo y evitar cualquier complicación.

Días atrás, momentos de tensión se vivieron cuando el pequeño cachorro color marrón sufrió una caída a la pileta. Afortunadamente Camila estaba cerca y pudo rescatarlo, evitando que la cosa pasara a mayores.

Antes de dirigirse a la fiesta, Nacho y la Tora tomaron a los pequeños perritos para llevarlos a la pieza. Pero cuando estuvieron dispuestos a trasladarlos, un fuerte alarido preocupó a los chicos.

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"¿Qué le pasa?, ¿Por qué llora así?", fue la reacción de Lucila cuando escuchó el grito de Morita, la perra negra. "Ay, le estoy tocando la panza y grita, así que le debe doler me parece", añadió.

Luego ya cuando todos dispusieron sus miradas hacia la adolorida mascota, se dieron cuenta que en realidad, era una molestia en su patita: "Sí, es la patita", respondieron varios de los chicos casi a la misma vez.

Rápidamente desde la producción del programa cortaron la transmisión. Pero momentos después, el conductor Roberto Funes Ugarte confirmó que Mora había sido atendida por uno de los veterinarios contratados por Telefé.