¿Te ha pasado? Este el motivo por el que nos ponemos tristes después del sexo
El momento en el que se está practicando el sexo puede ser de lo más placentero, entre besos, caricias, abrazos y mucho placer. Sin embargo, una vez terminada la acción pueden aparecer sentimientos muy feos como enojo, irritabilidad o angustia.
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A esto se lo llama disforia postcoital y es un trastorno sexual de carácter psicológico, con diversas causas y también algunas consecuencias.
Algunos estudios indican que al menos un 56% de las mujeres han sufrido alguna vez en la vida la denominada disforia postcoital sexual (DPS), mientras que los hombres se sitúan alrededor del 41%.
Las causas
Las causas están muy ligadas a 4 hormonas: dopamina, serotonina, endorfina y oxitocina son parte del cóctel que nuestro cerebro secreta a discreción cuando practicamos relaciones sexuales, las mismas están fuertemente relacionadas con el placer. En el caso de la oxitocina, se libera en gran cantidad en el orgasmo y tiene así una gran asociación con el placer sexual y la formación de vínculos emocionales.
Algo similar sucede con las endorfinas, una hormona y neurotransmisor cuyas funciones está en bloquear el dolor y hacernos sentir bien. Se convierte así nuestro cuerpo y cerebro en una montaña rusa de emociones que también tienen una implicación física con mucho de deportivo.
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En cuanto a la serotonina y la dopamina, muy relacionadas con la producción de esa sensación de bienestar y que junto a las otras dos, forma el denominado 'cuarteto de la felicidad'.
Pero por desgracia, después del subidón hormonal de euforia llega la calma y no siempre es bien recibida, ya que una vez que el efecto disminuye y nuestro cerebro vuelve a su normalidad, estas hormonas ya no están tan presentes y es el momento en el que la disforia postcoital aparece. A veces en sensaciones de temor, otras de vergüenza, rechazo, ansiedad y con más frecuencia tristeza y angustia.
Pero a no desesperar que es un estado pasajero, el cual no sucede siempre. Aunque si persiste en cada relación sexual, lo mejor sería consultar a un especialista.